La naturaleza es importante para los jóvenes porque ella los ayuda a desarrollarse completamente, comprender su entorno y la importancia de cuidarlo.
“La atmósfera limpia y refrescada por la brisa, sumada a la del compañerismo y consorcio continuo bajo los toldos, en el campo y alrededor de la fogata, hace que entre los muchachos se avive un entusiasmo edificante, y da al Jefe de Tropa una oportunidad, como ninguna otra, para ganarse la confianza y simpatía de los scouts.” Robert Baden-Powell, Guía para el Jefe de Tropa.
La naturaleza es el lugar idóneo para desarrollar el sentido de la aventura, la independencia y el trabajo en equipo. Una patrulla (¿recuerdas? Un equipo de 6 a 8 jóvenes de 11 a 16 años), debe trabajar por un bien común, alguna actividad en específico que le fomente la experiencia de algo nuevo, de enfrentarse a oportunidades de aprendizaje diferentes a las que ve en el local de grupo, donde se preparó para ello.
La montaña, la playa, el campo, la llanura, el lago, los bosques, etc. son esos ambientes naturales propios que le abren un mundo de posibilidades a un adolescente, pero que también lo coloca en un contexto de biodiversidad y lo ayuda a comprender el impacto de nuestras acciones, el cuidado que debemos tener ante la huella que dejamos. “Dejar el lugar mejor de como lo encontramos” es parte del aprendizaje que cada joven debe tener, no solo en ciudad sino también al aire libre. Aprender el uso adecuado del agua, el material para construir nuestras áreas de acampadas y todos los insumos para tener un tiempo cómodo en campamento, es parte de la enseñanza que demos del trato correcto a estos espacios naturales. Como acampar, como cuidar una fogata, qué hacer con los restos de los desperdicios que generamos.
Hay múltiples actividades que los jóvenes pueden realizar en la naturaleza, dependerá de los intereses de estos y de la creatividad de los adultos. Excursiones, percnotas y campamentos son la base de cualquier actividad, de allí cualquier variante es posible.
En la actualidad, cada vez es más difícil poder recurrir a los espacios naturales, es por ello por lo que el documento de revisión del Método Scout nos indica “la naturaleza también se refiere al entorno en el que vivimos. Así, en ambientes urbanos con espacios verdes limitados, este elemento del Método todavía puede expresarse a través de actividades al aire libre, ej. Practicar pionerismo en canchas de baloncesto.” Lo importante es involucrar a los jóvenes con su medioambiente, que adquieran el gusto por los espacios verdes, porque a la hora de salir de excursión, campamentos, etc., estos verán con mayor interés espacios naturales más grandes.
Las actividades deben ser ambientalmente sostenibles, que nuestro impacto negativo cada vez sea menor que el positivo. Que nuestras salidas dejen un aprendizaje sostenible y que podamos dejar en los espacios que visitemos, algo beneficioso que otros también puedan usar.